Una huelga de Justicia

Los jueces, magistrados y fiscales españoles convocaron ayer una huelga que ha tenido un seguimiento del 62% según los convocantes y ha sido cifrada en un 40% por el Consejo General del Poder Judicial. Esta es la tercera huelga en democracia convocada por asociaciones de jueces y la primera a la que se suman los fiscales, a través de la Unión Progresista de Fiscales y la Asociación Profesional Independiente de Fiscales.

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Foto: Carlos Suárez

Uno de los motivos de la protesta es el escaso número de jueces por habitante en España (10 por cada 100.000 habitantes), lo que hace situarse a nuestro país en el número 36 del ranking europeo por detrás de países como Albania (12), Portugal (17) o Grecia (20). Este dato, sumado a que en España la justicia supone un 1% del PIB ( la media europea es del 3,5%) hace prácticamente imposible una respuesta eficiente de los estamentos judiciales. Sigue leyendo

Empowerement, Empoderamiento

Va siendo hora de que hagamos balance de la repercusión que ha tenido la crisis social en nuestro imaginario y en nuestra conciencia social. La sociedad española parece haber madurado, a golpe de malas noticias, miseria y desesperación. No hace tiempo, nuestra conciencia social e idiosincrasia era un rebote de aquella que nos impuso el régimen fascista de Franco, la de una España grande, imparable e indivisible con algunos brotes de inadaptados, separatistas y anti-sistema a erradicar. Sin embargo, las clases medias ya no se escandalizan cuando oyen hablar a nuestros jóvenes (y no tan jóvenes) sobre la violencia policial, la dictadura del dinero y la corrupción institucionalizada.

Hoy en día, la gran mayoría entiende que el sistema político español favorece la corrupción. Las leyes de urbanismo aprobadas por el gobierno de Aznar encaminaron el dinero sucio hacia los bolsillos agradecidos de concejales y alcaldes de toda índole y signo político. Asimismo, todos ven claramente como toda legislación, incluida la constitucional, viene marcada por los avatares corruptos del dinero y quienes lo manejan, que no entienden de esperanza, muerte y desolación. El siguiente ejemplo de esto será el de permitir fumar en los casinos de Sheldon en Alcorcón. Todos saben, sabemos, que la socialdemocracia europea actual, donde la hay, es una farsa. Sigue leyendo